No. 8 - Abril 2000
Indice Contáctenos

La cultura es diversa, (y por suerte que lo es), y la necesidad de respeto y complementación mutua es tan necesaria entre los diversos pueblos del planeta, como entre otras antinomias entre las que está el público y los artistas.

Público y Artistas

(página 2)

De acuerdo a la vertiginosidad de cómo se desarrollan los acontecimientos en el plano de la cultura, cabe preguntarnos si es posible acortar la brecha entre público y artistas, y saltar la valla propuesta por Hausser, identificando a los actores responsables, para exigir de ellos una actitud acorde. Y llegado a este punto, es obvio que está implicada toda la sociedad, ya que sus integrantes son público y artistas.

Una primera propuesta implica al sistema educativo como acercador de las partes. Por su puesto que aquí hay mucho por hacer: no hay comprensión posible, cuando las grandes mayorías no adquieren ciertos bienes de la cultura: códigos, mensajes, ideas, sensibilidades, etc. Esto eximiría de “culpa” al gran público que sumido en las coordenadas que imponen los medios masivos de comunicación, la cultura básica de lo que Sartori llama el “Homo videns” (en contraposición al “Homo sapiens”) -predominancia de la televisión y la imagen fácil-, estaría imposibilitada de mejores logros.

Marcel Duchamp (1887-1968). "Fountain", Ready-made: porcelain urinal (1917), altura 60 cm.
El descubrimiento del ready made en el siglo XX revoluciono las posibilidades para las creaciones artisticas, al permitir el uso de un objeto cualquiera en una obra de arte.

Si bien la tendencia sana de toda sociedad debe ser la de extender, y democratizar los bienes culturales, o sea tener en cuenta su carácter cuantitativo, no debemos olvidar el aspecto cualitativo de dichos bienes, que son sociales, y que su adquisición no está libre de clases, roles, medios, etc.

Olvidarlo conduce a una visión esquemática de la cultura: una entidad única y abstracta a la que todos aspiran a dominar. La cultura es diversa, (y por suerte que lo es), y la necesidad de respeto y complementación mutua es tan necesaria entre los diversos pueblos del planeta, como entre otras antinomias entre las que está el público y los artistas. Una visión igualadora o igualitaria no debe pasar por alto cuan imposible resultaría decidir de antemano hacia dónde debemos igualar.

No parece aceptable que el ideal de cultura esté representado por los grupos de acumulación de conocimiento tal como se desarrollan en un mundo tan desigual. Nos inclinaríamos más bien por potenciar todas las expresiones culturales: multiplicaría los caminos, y contribuiría a la formación de la verdadera Cultura Humana, no por la uniformización sino por la acumulación y la diversidad.

Comprender el problema en forma global plantea grandes desafíos a la educación; es necesaria una actitud más exploratoria que dogmática o académica.

Y volviendo al tema de las responsabilidades, todos absolutamente todos, en tanto seres pensantes y participantes de cultura estamos en condiciones de adoptar esa actitud de respeto y complementación. Valores básicos de tolerancia y convivencia están en juego en la diversidad de expresiones culturales.

En cuanto a la participación de los artistas en este tema, y más allá de que podamos relativizar la intencionalidad de la obra de arte, existe un movimiento importante de búsqueda intercultural que también implica romper con otras barreras, por ejemplo, entre lo culto y lo popular.

1 2 3
Indice     Editorial     Pintura     Cultura     Fotografía     Cine     Galería
Copyright © 2000 Arte x Arte. Todos los Derechos Reservados