Las playas de La Barra son playas familiares, pequeñas comparadas con las otras océanicas que le siguen hacia el este.
Generalmente debido a su caracter familiar, a que no hay paradores grandes cerca y a que casi todas las casas particulares tienen acceso directo sin calles que se interpongan, no encontrará música alta, ni eventos especiales, sino calma y tranquilidad.
El mar en esta zona, debido a la desembocadura del arroyo Maldonado puede jugarle una mala pasada a pesar de su apariencia calma.
Una característica a destacar es la vibración de la arena bajo sus pies cuando se está en el agua debido a contracorrientes producidas por la rompiente del arroyo al entrar al mar.
Hay días de bajante en que se puede cruzar caminando a la otra costa, pero constituye un fenómeno muy raro.